Fue confeccionado para romper el récord mundial. Mide más de 45 metros y fue presentado en la Feria Internacional de Turismo de La Habana
El tabaquero cubano José Castelar Cairo, autor de varios habanos gigantes que le valieron certificaciones en el libro Guinness de los récords, volvió a romper en La Habana la marca del cigarro más largo del mundo con un puro de 45,38 metros.
"Cueto", como es conocido este torcedor con 47 años de oficio, comenzó a liar el puro el pasado día 3 y lo finalizó el viernes, en el marco de la Feria Internacional de Turismo.
El nuevo puro supera la marca impuesta en el 2006 por el norteamericano Wally Reyes con un cigarro de 32 metros de largo.
Durante la semana que duró su trabajo en la Fortaleza de la Cabaña, el cubano utilizó capas de tabaco de las Vegas de San Juan y San Luis, de Pinar del Río, donadas por las famosas fábricas Partagás y H. Upmann.
En el 2001, "Cueto" impuso su primer récord Guinness con un habano de 11,04 metros, luego lo superó en el 2003 con otro cigarro de 14,80, y logró un tercero de 20,41 en el 2005.
El tabaquero cubano José Castelar Cairo, autor de varios habanos gigantes que le valieron certificaciones en el libro Guinness de los récords, volvió a romper en La Habana la marca del cigarro más largo del mundo con un puro de 45,38 metros.
"Cueto", como es conocido este torcedor con 47 años de oficio, comenzó a liar el puro el pasado día 3 y lo finalizó el viernes, en el marco de la Feria Internacional de Turismo.
El nuevo puro supera la marca impuesta en el 2006 por el norteamericano Wally Reyes con un cigarro de 32 metros de largo.
Durante la semana que duró su trabajo en la Fortaleza de la Cabaña, el cubano utilizó capas de tabaco de las Vegas de San Juan y San Luis, de Pinar del Río, donadas por las famosas fábricas Partagás y H. Upmann.
En el 2001, "Cueto" impuso su primer récord Guinness con un habano de 11,04 metros, luego lo superó en el 2003 con otro cigarro de 14,80, y logró un tercero de 20,41 en el 2005.
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